Con el fin de sanear el río Elbe de desechos dañinos, en el área de la ciudad Hradec Kralové (República Checa), fue construida una nueva planta de tratamiento para recibir y limpiar las aguas residuales del municipio y las industrias de esa región.

Todas las aguas sucias son conducidas por un túnel de 112” de diámetro, a una profundidad de hasta 28 m para hacerlas llegar a la planta de tratamiento.

La estación de bombeo instalada antes del proceso de tratamiento ha sido equipada por 4 bombas sumergibles para bombear 400 l/s cada una (modelo: FA30.77D + FKT 532-6/48) y 5 bombas sumergibles de 1000 l/s cada una (modelo: FA 50.98V-690 + FKT 72-6/54G)

Las autoridades de la ciudad no dudaron en adquirir bombas en la marca WILO-EMU. “Un gran proyecto requiere un gran fabricante” fueron las palabras del ingeniero en jefe del proyecto, quien al parecer tiene muchos años de experiencia.